Días antes comenzaron los nervios...
No soy corredora, y este reto me parecía una gran locura.
Pero...claro...la emoción de los preparativos empezaba a embriagarme.
Se acercaba el momento.
Todo listo! Comienza la aventura!!
Salimos para Zahara de la Sierra, lugar en el que vamos a instalar nuestro centro de control. Nuestros queridos amigos, Isabel y Juan Carlos, nos han prestado su piso. Mil grac...ias!
Tenemos poco tiempo. Soltamos bártulos y nos vamos a Ronda. Hay que recoger el dorsal.
Ronda está en pleno bullicio. Hay gente y legionarios por todas partes. Colas para los dorsales, colas para dejar las bicicletas, colas para dejar las mochilas que van a los avituallamientos del camino...
Si miras a tu alrededor sólo ves gente y más gente con los ojos centelleantes; la ilusión de los participantes se vislumbra en sus rostros.
De cena...pasta! Como no...
Y a dormir pronto. Mañana es el gran día!
Nos levantamos temprano, a las 7:00. Juanma ha quedado con el resto del equipo en el cruce, para desayunar y llegar a la salida con tiempo.
Ya va preparado. Lleva hasta el dorsal puesto!!
Yo vuelvo a Zahara. Allí me esperan Marta y Guillermo. Javier no ha podido acompañarnos (el año que viene...si Dios quiere)
Nos vestimos para la ocasión. Juanma no lo sabe...he preparado unas camisetas. 101Km Ronda. Papá: tú puedes!
Primer encuentro: Puente de la Ventilla. Lleva pocos kilómetros, pero hace mucho calor. Aquí lo vemos dos veces, en el 14 y el 26 aproximadamente. Va bien. Muy animado! Se ha sorprendido al vernos con las camisetas! No se lo esperaba..
Segundo encuentro: Setenil de las Bodegas. Punto kilométrico: 58'343. Repone fuerzas con una coca-cola fresquita, plátano y chocolate. Sigue bien. No se para. Ni siquiera ha querido cambiarse la camiseta.
Siguiente: el cuartel de la legión (77'120). Ya son las 21:00; lleva corriendo 10 horas. Corriendo, sí corriendo; porque llega así...como si tal cosa.
"No te preocupes. Voy bien"
No sé si creerle.
Suerte que aquí se unen algunos del club para acompañarlo y animarlo en estos últimos kilómetros. Sé que esto hará que se le haga el final un poco más cómodo. !Gracias chicos!
Yo me quedo un poco más tranquila.
Ahora...a Ronda!! A esperar que llegue.
¡Qué largo se nos hace...! Guillermo y Marta están cansados. Llevamos todo el día de acá para allá. Ha hecho mucho calor. La gente anima a los que van llegando y a nosotros, que estamos esperando.
22:30. "Voy bien. Ya me quedan sólo 13"
Pero...¡Qué largos estos últimos trece kilómetros!
24:00. "Sólo me faltan 3!!!"
No lo puedo evitar. Necesito llamarle por teléfono. Necesito saber que todo va bien.
Por suerte mi móvil no para. Todos los amigos me bombardean a whatsapp; incluso los que no tienen mi teléfono han hecho por conseguirlo. Esto hace que el tiempo pase un poco más deprisa. ¡Gracias a todos!
¡¡¡¡¡¡Ahí vieeeeeeene!!!!
Guillermo y Marta salen a su encuentro. De repente, parecen haber despertado. Aún le quedan unos metros hasta la meta.
Se acerca. Me da un beso. Me abraza. ¡Está llorando!
La gente aplaude y anima.
Los niños y los compañeros de equipo lo acompañan corriendo.
¡Ha llegado!!!
¡Gracias a todos los que habéis estado ahí!
Juanma....estamos orgullosos. Felicidades!! Los niños y yo nos alegramos de haber compartido esta experiencia contigo. ¡Te queremos!!
No soy corredora, y este reto me parecía una gran locura.
Pero...claro...la emoción de los preparativos empezaba a embriagarme.
Se acercaba el momento.
Todo listo! Comienza la aventura!!
Salimos para Zahara de la Sierra, lugar en el que vamos a instalar nuestro centro de control. Nuestros queridos amigos, Isabel y Juan Carlos, nos han prestado su piso. Mil grac...ias!
Tenemos poco tiempo. Soltamos bártulos y nos vamos a Ronda. Hay que recoger el dorsal.
Ronda está en pleno bullicio. Hay gente y legionarios por todas partes. Colas para los dorsales, colas para dejar las bicicletas, colas para dejar las mochilas que van a los avituallamientos del camino...
Si miras a tu alrededor sólo ves gente y más gente con los ojos centelleantes; la ilusión de los participantes se vislumbra en sus rostros.
De cena...pasta! Como no...
Y a dormir pronto. Mañana es el gran día!
Nos levantamos temprano, a las 7:00. Juanma ha quedado con el resto del equipo en el cruce, para desayunar y llegar a la salida con tiempo.
Ya va preparado. Lleva hasta el dorsal puesto!!
Yo vuelvo a Zahara. Allí me esperan Marta y Guillermo. Javier no ha podido acompañarnos (el año que viene...si Dios quiere)
Nos vestimos para la ocasión. Juanma no lo sabe...he preparado unas camisetas. 101Km Ronda. Papá: tú puedes!
Primer encuentro: Puente de la Ventilla. Lleva pocos kilómetros, pero hace mucho calor. Aquí lo vemos dos veces, en el 14 y el 26 aproximadamente. Va bien. Muy animado! Se ha sorprendido al vernos con las camisetas! No se lo esperaba..
Segundo encuentro: Setenil de las Bodegas. Punto kilométrico: 58'343. Repone fuerzas con una coca-cola fresquita, plátano y chocolate. Sigue bien. No se para. Ni siquiera ha querido cambiarse la camiseta.
Siguiente: el cuartel de la legión (77'120). Ya son las 21:00; lleva corriendo 10 horas. Corriendo, sí corriendo; porque llega así...como si tal cosa.
"No te preocupes. Voy bien"
No sé si creerle.
Suerte que aquí se unen algunos del club para acompañarlo y animarlo en estos últimos kilómetros. Sé que esto hará que se le haga el final un poco más cómodo. !Gracias chicos!
Yo me quedo un poco más tranquila.
Ahora...a Ronda!! A esperar que llegue.
¡Qué largo se nos hace...! Guillermo y Marta están cansados. Llevamos todo el día de acá para allá. Ha hecho mucho calor. La gente anima a los que van llegando y a nosotros, que estamos esperando.
22:30. "Voy bien. Ya me quedan sólo 13"
Pero...¡Qué largos estos últimos trece kilómetros!
24:00. "Sólo me faltan 3!!!"
No lo puedo evitar. Necesito llamarle por teléfono. Necesito saber que todo va bien.
Por suerte mi móvil no para. Todos los amigos me bombardean a whatsapp; incluso los que no tienen mi teléfono han hecho por conseguirlo. Esto hace que el tiempo pase un poco más deprisa. ¡Gracias a todos!
¡¡¡¡¡¡Ahí vieeeeeeene!!!!
Guillermo y Marta salen a su encuentro. De repente, parecen haber despertado. Aún le quedan unos metros hasta la meta.
Se acerca. Me da un beso. Me abraza. ¡Está llorando!
La gente aplaude y anima.
Los niños y los compañeros de equipo lo acompañan corriendo.
¡Ha llegado!!!
¡Gracias a todos los que habéis estado ahí!
Juanma....estamos orgullosos. Felicidades!! Los niños y yo nos alegramos de haber compartido esta experiencia contigo. ¡Te queremos!!
Excelente el relato. Claro, conciso, sobrio y sobre todo, muy, muy, muy emotivo. Enhorabuena. He disfrutado leyéndolo.
ResponderEliminarMuy buen relato emocionante. Enhorabuena
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